Una madrugada de verano


Análisis real que poco me gustas. El trafico de Lima que cada día se hace peor. Dos horas entre San Miguel-La Molina (viceversa también) ya se hace mas tedioso. Así que se me ha metido la idea de alquilar un piso cerca a mi chamba. Bueno no se. Suena un gran proyecto y que me da algo de temor también. Me lo pensare mejor, hasta un par de meses. Sigo ahí. Pidiendo un aumento de sueldo. Planificando una maestría en Europa. Preparando un viaje a Cuzco. Como dice mi madre. Soñando, alucinando, fantaseando. De eso he estado viviendo este tiempo... Tratando de buscarlo motivos al tiempo. Es cierto, como le decía a Canis Lupus, siento que en el transcurso de los años fui perdiendo la mística. Y se me viene las inseguridades, los complejos, los traumas que ya iba superando. Pensando que hacer con mi cabello. Despidiendome de algunos amigos que el tiempo termina por separar. Buscando con quien tomarme un Peroni con su limón y sal. Encontrando cualquier pretexto para salir a caminar de noche. Recordando el atardecer infinito en Taganga. Estirando los nuevos soles para que me duren el resto del mes. Temiéndole al futuro, al fracaso. Es lo que tiene escuchar Mar de Copas un sábado por la madrugada. Me pone fatal... pero ahí sigo.

0 comentarios: