Que siempre de vez en cuando sea yo

Tengo mucha ansiedad en las venas. Miedos de marioneta-titiritero. Antes de la Navidad, pase los últimos días del año en San Miguel y me da un toque de nostalgia todo lo ocurrido este año. El volver a casa de mis padres por las fiestas y ver que ya no todo es igual. El querer ya no estar aquí salvo que sea con fechas de salida. El 2010 ya casi acaba . Aquí me encuentro. Maquinando mis proyectos, mis mundos [aunque el sexo me quita de rato en rato tiempo].   He aprovechado para hacer mis ultimas locuras del año.  El sol  de verano limeño que ya empieza a abochornar. Y a mi me da miedo como ser yo sin perder la espontaneidad, la transgresión, la sal. Quiero que siempre pueda mandar a la mierda todo, de vez en cuando, y comprarme un helado de sauco y caminar tranquilo por la calle. Que mi vida sea siempre, a veces, un poco Almodóvar. Que siempre decir no necesitar a nadie salvo amores y amistades líquidas. Una cosa es decirlo y otra es que caletamente el mundo se vaya riendo de mi. No quiero de terminar de funcionario asesino.

Acompañame

El: ¿Sabes que decía el cable que le puse a mi padre?
Ella: No me interesa
El: Que había encontrado novia en España
Ella: Enhorabuena
El: Me contesto: si te casas, considerate desheredado
Ella: Y tu, ¿que piensas hacer?
El: Si me sonríes, considerarme desheradado y  muy feliz
Ella: No te creo
El: Palabra de estudiante pobre. ¿Me crees ahora?
Ella: Si

Y allí es cuando yo lloró y solo Alcibiades me mira con desdén.

El dia que nunca llegaste

Hubiese querido que no trascendiera. Borrarte de todo esto que llamamos "red social" postmoderna y no importarme. Pero no pude. ¿Por que?. No lo se. No es lo comun en mi.

En el paro

Nunca pensé que entrar al desempleo me causaría un leve sentimiento de felicidad.  Fue algo así como un buen polvo con alguien que amas. Había perdido la motivación. No podía aguantar llegar un nuevo año sentado en una silla negra metida en un cubículo monótono haciendolas de negro literario. Y este trance me encuentro. Aunque me disguste la idea, voy a pasar el verano limeño en La Molina en casa de mis padres. En cuanto pueda, me mudare de nuevo. Las tenues días de brillo solar de Lima me animan, me llenan de cosas en la cabeza, pero también me producen ansiedad.  Hoy feriado me he levantado a las 6:00am para hacer una base de datos. Alucina.