Que quiero hibernar

Hace muchas lunas que no salía. Esa noche vino Kike; como de vez en cuando suele hacer. Comimos en China Wok donde habían cambiado a los mozos gileadores por otros más despistados. Luego fuimos al pub de Petit Thouars. Dimos un ronda por los ambientes, entramos al baño super transgresor y de estética sadomasoquista. Estuvimos parados un rato decidiendo si quedarnos o no hasta que el anfitrión nos preguntó que íbamos a pedir y decidimos quitarnos. Al final terminamos en la disco del Centro de Lima bailando hasta cerca las 3. En esos días es cuando comenzó a sentirse que el frió y la humedad en Lima han estado mas crudos. Esto me produce una modorra increíble. La ropa sucia acumulada. Los platos sin lavar. El closet sin ordenar. Los líos en la chamba. Las deudas. Es como si todo confabulara a empujarme a la cama a dormir. También han sido días donde me han estado proponiendo para hacer tríos y la verdad que, a diferencia de antes, ya no me siento halagado. Hoy me he colocado todo la ropa polar que tenia, he visto Soñadores de Bertolucci en mi laptop (desde hace tiempo deseaba verla) y, luego de hacerme una paja, pues he dormido todo lo que he podido.

Que Iquitos

No importa la infeccion estomacal que me causó el jugo de ungurahui en el mercado de Belen. Fueron dias agradables en esa ciudad en medio de la selva amazonica. Mis recomendados en Iquitos: La Blanquita (chorizo loretano y cecinas generosas); El Huaralino (huaracazu frito con aji charapa) y El Musmuqui (SVSS y demas tragos exóticos; aqui hay de los que entienden si les interesa). De musica de fondo: un videillo kitsch, divertido, refrescante que va con la ciudad.