Jugábamos a conocer el planeta entero

Ya me voy sientiendome visita en una casa que alguna vez fue mi hogar. De mi antiguo cuarto solo quedan mis ropas de chibolo, algunos zapatos viejos y un poster de Plaza Sésamo. Estoy empezando a gustar de la soledad. Y eso me asusta. No es que no les quiera madre (feliz dia), padre, hermanas; pero en realidad yo creo que me fui de esta casa hace mucho tiempo. Solo faltaba llevarme mi cuerpo. Es que tenia que buscar a mi alma fugitiva que queria conocer el universo entero y se cansó de la monotonía de los barrios tranquilos de la Lima del sudeste. Ya sabes, el extraño viaje.